Seguidores

domingo, 1 de enero de 2012

Lectura Hablada de La Santa Biblia R-V 2009 SUD: Dia 2: Genesís 4-7


Capítulo 4
Eva da a luz a Caín y a Abel — Ellos ofrecen sacrificios — Caín mata a Abel y es maldecido por Jehová, quien además pone una marca sobre él — Los hijos de los hombres se multiplican — Adán engendra a Set y Set engendra a Enós.

1 Y conoció Adán a su esposa Eva, la cual concibió y dio a luz a Caín, y dijo: He adquirido varón por voluntad de Jehová.

2 Y después dio a luz a su hermano Abel. Y fue Abel pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra.

3 Y aconteció, andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová.

4 Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, y de su grosura. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda;

5 mas no miró con agrado a Caín ni a la ofrenda suya. Y Caín se ensañó en gran manera y decayó su semblante.

6 Entonces Jehová dijo a Caín: ¿Por qué te has ensañado y por qué ha decaído tu semblante?

7 Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? Y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, te deseará, pero tú te enseñorearás de él.

8 Y habló Caín a su hermano Abel; y aconteció que estando ellos en el campo, Caín se levantó contra su hermano Abel y le mató.

9 Y Jehová dijo a Caín: ¿Dónde está Abel, tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano?

10 Y él le dijo: ¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí desde la tierra.

11 Ahora pues, maldito seas tú de la tierra, que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano.

12 Cuando labres la tierra, no te volverá a dar su fuerza; errante y vagabundo serás en la tierra.

13 Y dijo Caín a Jehová: Grande es mi castigo para soportarlo.

14 He aquí, me echas hoy de la faz de la tierra, y de tu presencia me esconderé; y seré errante y vagabundo en la tierra; y sucederá que cualquiera que me hallare me matará.

15 Y le respondió Jehová: Ciertamente cualquiera que mate a Caín, siete veces será castigado. Entonces Jehová puso una marca sobre Caín, para que no lo matase cualquiera que le hallara.

16 Y salió Caín de delante de Jehová y habitó en la tierra de Nod, al oriente de Edén.

17 Y conoció Caín a su esposa, la cual concibió y dio a luz a Enoc; y edificó una ciudad, a la que le puso el nombre de su hijo, Enoc.

18 Y a Enoc le nació Irad, e Irad engendró a Mehujael, y Mehujael engendró a Metusael, y Metusael engendró a Lamec.

19 Y Lamec tomó para sí dos esposas; el nombre de una era Ada, y el nombre de la otra, Zila.

20 Y Ada dio a luz a Jabal, el que fue padre de los que habitan en tiendas y crían ganados.

21 Y el nombre de su hermano era Jubal, el que fue padre de todos los que tocan arpa y flauta.

22 Y Zila también dio a luz a Tubal-caín, artífice de toda obra de metal y de hierro; y la hermana de Tubal-caín fue Naama.

23 Y dijo Lamec a sus esposas:

Ada y Zila, oíd mi voz,
esposas de Lamec, escuchad mis palabras:
A un hombre maté por mi herida
y a un joven por mi golpe.

24

Si siete veces será vengado Caín,
Lamec en verdad setenta veces siete lo será.

25 Y conoció de nuevo Adán a su esposa, la cual dio a luz un hijo, y llamó su nombre Set: Porque Dios (dijo ella) me ha concedido otro hijo en lugar de Abel, a quien mató Caín.

26 Y a Set también le nació un hijo, y llamó su nombre Enós. Entonces los hombres comenzaron a invocar el nombre de Jehová.

Capítulo 5

Las generaciones de Adán son: Adán, Set, Enós, Cainán, Mahalaleel, Jared, Enoc (quien caminó con Dios), Matusalén, Lamec y Noé (quien engendró a Sem, a Cam y a Jafet).

1 Éste es el libro de las generaciones de Adán. El día en que creó Dios al hombre, a semejanza de Dios lo hizo.

2 Varón y hembra los creó; y los bendijo, y llamó el nombre de ellos Adán el día en que fueron creados.

3 Y vivió Adán ciento treinta años, y engendró un hijo a su semejanza, conforme a su imagen, y llamó su nombre Set.

4 Y fueron los días de Adán después que engendró a Set ochocientos años, y engendró hijos e hijas.

5 Y fueron todos los días que vivió Adán novecientos treinta años, y murió.

6 Y vivió Set ciento cinco años, y engendró a Enós.

7 Y vivió Set después que engendró a Enós ochocientos siete años, y engendró hijos e hijas.

8 Y fueron todos los días de Set novecientos doce años, y murió.

9 Y vivió Enós noventa años, y engendró a Cainán.

10 Y vivió Enós después que engendró a Cainán ochocientos quince años, y engendró hijos e hijas.

11 Y fueron todos los días de Enós novecientos cinco años, y murió.

12 Y vivió Cainán setenta años, y engendró a Mahalaleel.

13 Y vivió Cainán después que engendró a Mahalaleel ochocientos cuarenta años, y engendró hijos e hijas.

14 Y fueron todos los días de Cainán novecientos diez años, y murió.

15 Y vivió Mahalaleel sesenta y cinco años, y engendró a Jared.

16 Y vivió Mahalaleel después que engendró a Jared ochocientos treinta años, y engendró hijos e hijas.

17 Y fueron todos los días de Mahalaleel ochocientos noventa y cinco años, y murió.

18 Y vivió Jared ciento sesenta y dos años, y engendró a Enoc.

19 Y vivió Jared después que engendró a Enoc ochocientos años, y engendró hijos e hijas.

20 Y fueron todos los días de Jared novecientos sesenta y dos años, y murió.

21 Y vivió Enoc sesenta y cinco años, y engendró a Matusalén.

22 Y caminó Enoc con Dios después que engendró a Matusalén trescientos años, y engendró hijos e hijas.

23 Y fueron todos los días de Enoc trescientos sesenta y cinco años.

24 Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque lo llevó Dios.

25 Y vivió Matusalén ciento ochenta y siete años, y engendró a Lamec.

26 Y vivió Matusalén después que engendró a Lamec setecientos ochenta y dos años, y engendró hijos e hijas.

27 Fueron, pues, todos los días de Matusalén novecientos sesenta y nueve años, y murió.

28 Y vivió Lamec ciento ochenta y dos años, y engendró un hijo;

29 y llamó su nombre Noé, diciendo: Éste nos aliviará de nuestras obras y del trabajo de nuestras manos, a causa de la tierra que Jehová maldijo.

30 Y vivió Lamec después que engendró a Noé quinientos noventa y cinco años, y engendró hijos e hijas.

31 Y fueron todos los días de Lamec setecientos setenta y siete años, y murió.

32 Y siendo Noé de quinientos años, engendró a Sem, a Cam y a Jafet.

Capítulo 6

Los hijos de Dios se casan con las hijas de los hombres — Los hombres se vuelven inicuos; la tierra se llena de violencia y toda carne se corrompe — Se anuncia el Diluvio — Dios establece su convenio con Noé, quien construye un arca para salvar a su familia y a diversos seres vivientes.

1 Y acaeció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra y les nacieron hijas,

2 y viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí esposas, escogiendo entre todas.

3 Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; y serán sus días ciento veinte años.

4 Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se unieron los hijos de Dios a las hijas de los hombres y les engendraron hijos. Éstos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre.

5 Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo sólo el mal.

6 Y se arrepintió Jehová de haber hecho al hombre en la tierra, y le pesó en su corazón.

7 Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo, porque me arrepiento de haberlos hecho.

8 Pero Noé halló gracia ante los ojos de Jehová.

9 Éstas son las generaciones de Noé: Noé, varón justo, era perfecto en su generación; con Dios caminó Noé.

10 Y engendró Noé tres hijos: a Sem, a Cam y a Jafet.

11 Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia.

12 Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida, porque toda carne había corrompido su camino sobre la tierra.

13 Y dijo Dios a Noé: El fin de toda carne ha venido delante de mí; porque la tierra está llena de violencia a causa de ellos; y he aquí que yo los destruiré junto con la tierra.

14 Hazte un arca de madera de gofer; harás aposentos en el arca, y la calafatearás con brea por dentro y por fuera.

15 Y de esta manera la harás: de trescientos codos la longitud del arca, de cincuenta codos su anchura y de treinta codos su altura.

16 Una ventana harás al arca, y la acabarás a un codo de elevación por la parte de arriba y pondrás la puerta del arca a su lado; y le harás piso bajo, segundo y tercero.

17 Y yo, he aquí, yo voy a enviar un diluvio de aguas sobre la tierra, para destruir toda carne en que haya espíritu de vida debajo del cielo; todo lo que hay en la tierra morirá.

18 Mas estableceré mi convenio contigo, y entrarás en el arca tú, y tus hijos, y tu esposa y las esposas de tus hijos contigo.

19 Y de todo lo que vive, de toda carne, dos de cada especie meterás en el arca, para que tengan vida contigo; macho y hembra serán.

20 De las aves según su especie, y de las bestias según su especie, de todo reptil de la tierra según su especie, dos de cada especie vendrán a ti para que tengan vida.

21 Y toma contigo de todo alimento que se come y almacénalo; y servirá de alimento para ti y para ellos.

22 Y lo hizo Noé; así hizo conforme a todo lo que Dios le mandó.

Capítulo 7

La familia de Noé y diversos animales y aves entran en el arca — Llega el Diluvio y las aguas cubren toda la tierra — Todos los demás seres vivientes son destruidos.

1 Y Jehová dijo a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca, porque he visto que tú eres justo delante de mí en esta generación.

2 De todo animal limpio tomarás siete parejas, macho y su hembra; mas de los animales que no son limpios, una pareja, macho y su hembra.

3 También de las aves de los cielos siete parejas, macho y hembra, para conservar viva la especie sobre la faz de toda la tierra.

4 Porque pasados aún siete días, yo haré llover sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches; y a todo ser viviente que hice raeré de sobre la faz de la tierra.

5 E hizo Noé conforme a todo lo que le mandó Jehová.

6 Y era Noé de seiscientos años cuando el diluvio de las aguas vino sobre la tierra.

7 Y entró Noé en el arca, y con él sus hijos, y su esposa y las esposas de sus hijos, por causa de las aguas del diluvio.

8 De los animales limpios, y de los animales que no eran limpios, y de las aves y de todo lo que se arrastra sobre la tierra,

9 de dos en dos entraron con Noé en el arca, macho y hembra, como mandó Dios a Noé.

10 Y sucedió que al séptimo día las aguas del diluvio vinieron sobre la tierra.

11 El año seiscientos de la vida de Noé, en el mes segundo, a los diecisiete días del mes, aquel día fueron rotas todas las fuentes del gran abismo, y las compuertas de los cielos fueron abiertas.

12 Y hubo lluvia sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches.

13 En este mismo día entraron en el arca Noé, y Sem, y Cam y Jafet, hijos de Noé, la esposa de Noé y las tres esposas de sus hijos con él;

14 ellos, y todos los animales silvestres según sus especies, y todos los animales domésticos según sus especies, y todo reptil que se arrastra sobre la tierra según su especie, y toda ave según su especie, todo pájaro, toda especie alada.

15 Y vinieron a Noé al arca, de dos en dos, de toda carne en que había espíritu de vida.

16 Y los que vinieron, macho y hembra de toda carne vinieron, como le había mandado Dios; y Jehová cerró la puerta tras él.

17 Y fue el diluvio cuarenta días sobre la tierra; y las aguas crecieron y alzaron el arca, y se elevó sobre la tierra.

18 Y prevalecieron las aguas y crecieron en gran manera sobre la tierra; y flotaba el arca sobre la faz de las aguas.

19 Y las aguas prevalecieron mucho sobre la tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos fueron cubiertos.

20 Quince codos más alto prevalecieron las aguas; y fueron cubiertos los montes.

21 Y murió toda carne que se mueve sobre la tierra, así de aves como de ganado, y de bestias, y de todo reptil que se arrastra sobre la tierra y todo hombre.

22 Todo lo que tenía aliento de espíritu de vida en sus narices, todo lo que había en la tierra, murió.

23 Así fue destruido todo ser viviente que había sobre la faz de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, y los reptiles y las aves del cielo; y fueron raídos de la tierra; y quedaron solamente Noé y los que con él estaban en el arca.

24 Y prevalecieron las aguas sobre la tierra ciento cincuenta días.


MusicPlaylist
Music Playlist at MixPod.com

Lectura de La Santa Biblia R-V 2009 SUD: Dia 1: Genesís 1-3


Génesis.Capítulo 1
Dios crea esta tierra y su cielo y todas las formas de vida en seis días — Se describen los hechos de cada día de la Creación — Dios crea al hombre, varón y hembra, a Su propia imagen — Se da dominio al hombre sobre todas las cosas, y se le manda multiplicarse y henchir la tierra.

1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.

2 Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas.

3 Y dijo Dios: Haya luz, y hubo luz.

4 Y vio Dios que la luz era buena, y separó Dios la luz de las tinieblas.

5 Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana el día primero.

6 Y dijo Dios: Haya un firmamento en medio de las aguas, y separe aquél las aguas de las aguas.

7 E hizo Dios el firmamento, y separó las aguas que estaban debajo del firmamento de las aguas que estaban sobre el firmamento. Y fue así.

8 Y llamó Dios al firmamento Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.

9 Y dijo Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así.

10 Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno.

11 Y dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su especie, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así.

12 Y produjo la tierra hierba verde, hierba que da semilla según su naturaleza, y árbol que da fruto, cuya semilla está en él, según su especie. Y vio Dios que era bueno.

13 Y fue la tarde y la mañana el día tercero.

14 Y dijo Dios: Haya lumbreras en el firmamento de los cielos para separar el día de la noche; y sean por señales, y para las estaciones, y para los días y para los años;

15 y sean por lumbreras en el firmamento de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así.

16 E hizo Dios las dos grandes lumbreras: la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas.

17 Y las puso Dios en el firmamento de los cielos para alumbrar sobre la tierra,

18 y para señorear en el día y en la noche y para separar la luz de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno.

19 Y fue la tarde y la mañana el día cuarto.

20 Y dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra en la abierta expansión de los cielos.

21 Y creó Dios las grandes ballenas y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su especie, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno.

22 Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y henchid las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra.

23 Y fue la tarde y la mañana el día quinto.

24 Y dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su especie: bestias, y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así.

25 E hizo Dios los animales de la tierra según su especie, y ganado según su especie, y todo animal que se arrastra sobre la tierra según su especie. Y vio Dios que era bueno.

26 Y dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y tenga dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves de los cielos, y sobre las bestias, y sobre toda la tierra y sobre todo animal que se arrastra sobre la tierra.

27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.

28 Y los bendijo Dios y les dijo Dios: Fructificad y multiplicaos; y henchid la tierra y sojuzgadla; y tened dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves de los cielos y sobre todas las bestias que se mueven sobre la tierra.

29 Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda hierba que da semilla que está sobre la faz de toda la tierra; y todo árbol en que hay fruto de árbol que da semilla os será para comer.

30 Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida, toda hierba verde les será para comer. Y fue así.

31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.

Capítulo 2

Se termina la Creación — Dios descansa el séptimo día — Se explica la creación espiritual previa — Adán y Eva son puestos en el Jardín de Edén — Se les prohíbe comer del árbol de la ciencia del bien y del mal — Adán da nombre a toda criatura viviente — Jehová Dios une a Adán y a Eva en matrimonio.

1 Y fueron acabados los cielos y la tierra, y todas las huestes de ellos.

2 Y acabó Dios en el día séptimo la obra que había hecho, y reposó el día séptimo de toda la obra que había hecho.

3 Y bendijo Dios el día séptimo y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había creado y hecho.

4 Éstos son los orígenes de los cielos y de la tierra cuando fueron creados, el día en que Jehová Dios hizo la tierra y los cielos,

5 y toda planta del campo antes que fuese en la tierra, y toda hierba del campo antes que brotase; porque aún no había Jehová Dios hecho llover sobre la tierra, ni había hombre para que labrase la tierra;

6 sino que subía de la tierra un vapor que regaba toda la faz de la tierra.

7 Formó, pues, Jehová Dios al hombre del polvo de la tierra y sopló en su nariz el aliento de vida; y fue el hombre alma viviente.

8 Y había Jehová Dios plantado un huerto al oriente, en Edén, y puso allí al hombre que había formado.

9 Y Jehová Dios hizo de la tierra todo árbol agradable a la vista y bueno para comer; también el árbol de la vida en medio del huerto, y el árbol de la ciencia del bien y del mal.

10 Y salía de Edén un río para regar el huerto, y de allí se repartía en cuatro brazos.

11 El nombre del primero es Pisón; éste es el que rodea toda la tierra de Havila, donde hay oro;

12 y el oro de aquella tierra es bueno; hay allí también bedelio y ónice.

13 El nombre del segundo río es Gihón; éste es el que rodea toda la tierra de Etiopía.

14 Y el nombre del tercer río es Hidekel; éste es el que corre al oriente de Asiria. Y el cuarto río es el Éufrates.

15 Tomó, pues, Jehová Dios al hombre y le puso en el huerto de Edén, para que lo labrase y lo guardase.

16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer;

17 mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás, porque el día que de él comieres, de cierto morirás.

18 Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.

19 Formó, pues, Jehová Dios de la tierra toda bestia del campo y toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y lo que Adán llamó a los animales vivientes, ése es su nombre.

20 Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y a todo animal del campo; mas para Adán no se halló ayuda que fuese idónea para él.

21 Y Jehová Dios hizo caer un sueño profundo sobre Adán, y éste se quedó dormido. Entonces tomó una de sus costillas y cerró la carne en su lugar;

22 y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer y la trajo al hombre.

23 Y dijo Adán: Ésta es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada.

24 Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se allegará a su mujer, y serán una sola carne.

25 Y estaban ambos desnudos, Adán y su mujer, y no se avergonzaban.

Capítulo 3

La serpiente (Lucifer) engaña a Eva — Ella y después Adán participan del fruto prohibido — Su Simiente (Cristo) herirá la cabeza de la serpiente — Se explica el papel de la mujer y el del hombre — Adán y Eva son echados del Jardín de Edén — Adán preside — Eva llega a ser la madre de todos los vivientes.

1 Ahora bien, la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho, la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de ningún árbol del huerto?

2 Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer,

3 mas del fruto del árbol que está en medio del huerto, dijo Dios: No comeréis de él ni lo tocaréis, para que no muráis.

4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis;

5 sino que sabe Dios que el día en que comáis de él serán abiertos vuestros ojos y seréis como dioses, conociendo el bien y el mal.

6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos y deseable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.

7 Y fueron abiertos los ojos de ambos, y supieron que estaban desnudos. Entonces cosieron hojas de higuera y se hicieron delantales.

8 Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto al aire del día; y se escondieron el hombre y su mujer de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto.

9 Y llamó Jehová Dios al hombre y le dijo: ¿Dónde estás?

10 Y él respondió: Oí tu voz en el huerto, y tuve miedo, porque estaba desnudo; y me escondí.

11 Y le dijo: ¿Quién te ha dicho que estabas desnudo? ¿Has comido del árbol del cual yo te mandé que no comieses?

12 Y el hombre respondió: La mujer que me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí.

13 Entonces Jehová Dios dijo a la mujer: ¿Qué es lo que has hecho? Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí.

14 Y Jehová Dios dijo a la serpiente: Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu vientre te arrastrarás y polvo comerás todos los días de tu vida.

15 Y pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.

16 A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera tus dolores en tus embarazos; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti.

17 Y a Adán dijo: Por cuanto obedeciste la voz de tu mujer y comiste del árbol del cual te mandé, diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida.

18 Espinos y cardos te producirá, y comerás hierba del campo;

19 con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres y al polvo volverás.

20 Y llamó Adán el nombre de su mujer Eva, por cuanto ella fue la madre de todos los vivientes.

21 Y Jehová Dios hizo a Adán y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió.

22 Y dijo Jehová Dios: He aquí el hombre ha llegado a ser como uno de nosotros, conociendo el bien y el mal. Ahora, pues, no sea que alargue su mano y tome también del árbol de la vida, y coma y viva para siempre,

23 por tanto, lo sacó Jehová Dios del huerto de Edén, para que labrase la tierra de la que fue tomado.

24 Echó, pues, fuera al hombre y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.




MusicPlaylist
Music Playlist at MixPod.com