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martes, 27 de marzo de 2012

Lectura con Audio de la Santa Biblia RV 2009 SUD: Día 82 RUT 1-4


Rut
..Capítulo 1
Elimelec y su familia van a Moab por causa de la hambruna — Sus hijos contraen matrimonio — El padre y los hijos mueren — Rut la moabita, habiendo muerto su esposo, insiste en irse con Noemí — Ellas van a Belén.

1Y aconteció que en los días en que gobernaban los jueces, hubo hambre en la tierra. Y un hombre de Belén de Judá fue a vivir en los campos de Moab, él y su esposa y sus dos hijos.

2El nombre de aquel hombre era Elimelec, y el de su esposa, Noemí; y los nombres de sus dos hijos eran Mahlón y Quelión, efrateos de Belén de Judá. Llegaron, pues, a los campos de Moab y se quedaron allí.

3Y murió Elimelec, marido de Noemí, y quedó ella con sus dos hijos,

4los cuales tomaron para sí esposas de Moab; el nombre de una era Orfa, y el nombre de la otra, Rut; y habitaron allí unos diez años.

5Y murieron también los dos, Mahlón y Quelión, quedando así la mujer desamparada, sin sus dos hijos y sin su marido.

6Entonces se levantó con sus nueras y regresó de los campos de Moab, porque oyó en el campo de Moab que Jehová había visitado a los de su pueblo para darles pan.

7Salió, pues, del lugar donde había estado, y con ella sus dos nueras, y comenzaron a caminar para volver a la tierra de Judá.

8Y Noemí dijo a sus dos nueras: Andad, vuelva cada una a la casa de su madre; Jehová haga con vosotras misericordia, como la habéis hecho con los muertos y conmigo.

9Os conceda Jehová que halléis descanso, cada una en casa de su marido. Luego las besó, y ellas alzaron su voz y lloraron.

10Y le dijeron: Ciertamente nosotras volveremos contigo a tu pueblo.

11Y Noemí respondió: Volveos, hijas mías; ¿para qué habéis de ir conmigo? ¿Acaso tengo yo más hijos en el vientre que puedan ser vuestros maridos?

12Volveos, hijas mías, e idos, porque yo ya soy vieja para tener marido. Y aunque dijese: Esperanza tengo, y esta noche estuviese con marido y aun diese a luz hijos,

13¿esperaríais vosotras hasta que fuesen grandes? ¿Os quedaríais vosotras sin casar por amor a ellos? No, hijas mías; que mayor amargura tengo yo que vosotras, pues la mano de Jehová se ha salido contra mí.

14Mas ellas alzaron otra vez su voz y lloraron; y Orfa besó a su suegra, mas Rut se quedó con ella.

15Y Noemí dijo: He aquí tu cuñada se ha vuelto a su pueblo y a sus dioses; vuélvete tú tras ella.

16Y Rut respondió: No me ruegues que te deje y que me aparte de ti; porque adondequiera que tú fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios.

17Donde tú murieres, moriré yo y allí seré sepultada. Así me haga Jehová y aun me añada, porque sólo la muerte hará separación entre tú y yo.

18Y al ver Noemí que estaba tan resuelta a ir con ella, no dijo nada más.

19Anduvieron, pues, ellas dos hasta que llegaron a Belén. Y aconteció que entrando en Belén, toda la ciudad se conmovió por razón de ellas y decían: ¿No es ésta Noemí?

20Y ella les respondía: No me llaméis Noemí, sino llamadme Mara, porque en gran amargura me ha puesto el Todopoderoso.

21Yo me fui llena, pero Jehová me ha hecho volver con las manos vacías. ¿Por qué me llamáis Noemí, si ya Jehová ha dado testimonio contra mí, y el Todopoderoso me ha afligido?

22Así volvió Noemí, y con ella su nuera Rut la moabita; volvieron de los campos de Moab y llegaron a Belén al principio de la siega de la cebada.

Rut
..Capítulo 2

Rut recoge espigas en los campos de Booz, un pariente cercano de Noemí — Booz trata bondadosamente a Rut.

1Y tenía Noemí un pariente de su marido, hombre de mucha riqueza de la familia de Elimelec, el cual se llamaba Booz.

2Y Rut la moabita dijo a Noemí: Te ruego que me dejes ir al campo, y recogeré espigas en pos de aquel a cuyos ojos halle gracia. Y ella le respondió: Ve, hija mía.

3Fue, pues, y llegando, espigó en el campo en pos de los segadores; y afortunadamente aconteció que aquella parte del campo era de Booz, que era pariente de Elimelec.

4Y he aquí que Booz vino de Belén y dijo a los segadores: Jehová sea con vosotros. Y ellos respondieron: Jehová te bendiga.

5Y Booz dijo a su criado, el encargado de los segadores: ¿De quién es esta joven?

6Y el criado encargado de los segadores respondió y dijo: Es la joven de Moab que volvió con Noemí de los campos de Moab,

7y me ha dicho: Te ruego que me dejes espigar y recoger tras los segadores entre las gavillas; entró, pues, y está desde por la mañana hasta ahora, menos un poco que se detuvo en casa.

8Entonces Booz dijo a Rut: Oye, hija mía, no vayas a espigar a otro campo ni pases de aquí; y aquí estarás con mis criadas.

9Mira bien el campo que sieguen y síguelas, porque yo he mandado a los criados que no te molesten. Y cuando tengas sed, ve a las vasijas y bebe del agua que sacan los criados.

10Ella, entonces, bajando su rostro, se inclinó a tierra y le dijo: ¿Por qué he hallado gracia ante tus ojos para que tú me reconozcas, siendo yo extranjera?

11Y respondiendo Booz, le dijo: Por cierto se me ha declarado todo lo que has hecho por tu suegra después de la muerte de tu marido, y que, dejando a tu padre y a tu madre y la tierra donde naciste, has venido a un pueblo que antes no conocías.

12Jehová recompense tu obra, y tu remuneración sea completa de parte de Jehová Dios de Israel, puesto que has venido para refugiarte bajo sus alas.

13Y ella dijo: Señor mío, halle yo gracia delante de tus ojos, porque me has consolado y porque has hablado al corazón de tu sierva, aunque no soy ni como una de tus criadas.

14Y Booz le dijo a la hora de comer: Ven aquí, y come del pan y moja tu bocado en el vinagre. Y se sentó ella junto a los segadores, y él le dio del potaje, y comió hasta que se sació y le sobró.

15Se levantó luego para espigar. Y Booz mandó a sus criados, diciendo: Que recoja también espigas entre las gavillas, y no la avergoncéis;

16antes dejaréis caer a propósito de los manojos, y la dejaréis que espigue y no la reprendáis.

17Y espigó en el campo hasta el atardecer y desgranó lo que había recogido, y fue como un efa de cebada.

18Y lo tomó y se fue a la ciudad, y su suegra vio lo que había recogido. Sacó también luego lo que le había sobrado después de haberse saciado, y se lo dio.

19Y le dijo su suegra: ¿Dónde has espigado hoy? ¿Y dónde has trabajado? Bendito sea el que te ha reconocido. Y ella contó a su suegra lo que le había acontecido y dijo: El nombre del varón con quien hoy he trabajado es Booz.

20Y dijo Noemí a su nuera: Sea él bendito de Jehová, pues no ha rehusado a los vivos la benevolencia que tuvo para con los que han muerto. Le dijo después Noemí: Nuestro pariente es aquel varón; es uno de los que pueden redimirnos.

21Y Rut la moabita dijo: Además de esto me ha dicho: Permanece con mis criados hasta que hayan acabado toda mi siega.

22Y Noemí respondió a su nuera Rut: Mejor es, hija mía, que salgas con sus criadas, y que no te encuentren en otro campo.

23Estuvo, pues, espigando junto con las criadas de Booz hasta que se acabó la siega de la cebada y la del trigo; y vivía con su suegra.

Rut
..Capítulo 3

Por consejo de Noemí, Rut se acuesta a los pies de Booz — Booz promete, como pariente, hacerla su esposa.

1Y le dijo su suegra Noemí: Hija mía, ¿no he de buscar hogar para ti, para que te vaya bien?

2¿No es Booz nuestro pariente, con cuyas criadas tú has estado? He aquí que él avienta esta noche la parva de las cebadas.

3Te lavarás, pues, y te ungirás, y vistiéndote tus vestidos, irás a la era; mas no te darás a conocer al varón hasta que él haya acabado de comer y de beber.

4Y cuando él se acueste, observa tú el lugar donde él se acuesta, e irás, y descubrirás sus pies y te acostarás allí; y él te dirá lo que debas hacer.

5Y le respondió: Haré todo lo que tú me mandes.

6Descendió, pues, a la era e hizo todo lo que su suegra le había mandado.

7Y cuando Booz hubo comido y bebido, y su corazón estuvo contento, se retiró a dormir a un lado del montón. Entonces ella vino calladamente, y le descubrió los pies y se acostó.

8Y aconteció que a la medianoche se estremeció aquel hombre y se volvió; y he aquí que una mujer estaba acostada a sus pies.

9Entonces él dijo: ¿Quién eres? Y ella respondió: Yo soy Rut, tu sierva; extiende el borde de tu manto sobre tu sierva, por cuanto eres pariente cercano.

10Y él dijo: Bendita seas tú de Jehová, hija mía; has hecho mejor tu postrera bondad que la primera, no yendo tras los jóvenes, sean pobres o ricos.

11Ahora, pues, no temas, hija mía; yo haré contigo lo que tú digas, pues toda la gente de mi pueblo sabe que eres mujer virtuosa.

12Y ahora, aunque es cierto que yo soy pariente cercano, con todo eso hay un pariente más cercano que yo.

13Reposa aquí esta noche, y cuando sea de día, si él te redime, bien, que te redima; mas si él no te quisiere redimir, yo te redimiré, vive Jehová. Descansa, pues, hasta la mañana.

14Y reposó a sus pies hasta la mañana y se levantó, antes que nadie pudiese reconocer a otro. Y él dijo: Que no se sepa que una mujer ha venido a la era.

15Después le dijo: Quítate el manto que traes sobre ti y sujétalo bien. Y sujetándolo ella, él midió seis medidas de cebada y se las puso encima; y ella se fue a la ciudad.

16Y cuando llegó a donde estaba su suegra, ésta le dijo: ¿Qué hay, hija mía? Y le contó ella todo lo que con aquel varón le había acontecido.

17Y dijo: Estas seis medidas de cebada me dio, diciéndome: Para que no vayas con las manos vacías a tu suegra.

18Entonces Noemí dijo: Siéntate, hija mía, hasta que sepas cómo se resuelve el asunto, porque aquel hombre no descansará hasta que hoy concluya el asunto.

Rut
..Capítulo 4

El pariente más cercano se niega a cumplir con su deber, y Booz toma a Rut por esposa — Rut da a luz a Obed; éste fue padre de Isaí, quien engendró al rey David.

1Y Booz subió a la puerta y se sentó allí; y he aquí pasaba aquel pariente de quien Booz había hablado, y le dijo: Eh, tú, ven acá y siéntate. Y él fue y se sentó.

2Entonces él tomó a diez hombres de los ancianos de la ciudad y les dijo: Sentaos aquí. Y ellos se sentaron.

3Luego dijo al pariente: Noemí, que ha vuelto del campo de Moab, vende una parte de las tierras que tuvo nuestro hermano Elimelec.

4Y yo decidí hacértelo saber y decirte que la compres, delante de los que están aquí sentados y delante de los ancianos de mi pueblo. Si quieres redimirla, redímela; y si no quieres redimirla, decláramelo para que yo lo sepa, porque no hay otro que la redima sino tú, y yo después de ti. Y él respondió: Yo la redimiré.

5Entonces replicó Booz: El mismo día que compres las tierras de mano de Noemí, has de tomar también a Rut la moabita, esposa del difunto, para que conserves el nombre del muerto sobre su posesión.

6Y respondió el pariente: No puedo redimir para mí, no sea que perjudique mi heredad. Redime tú usando de mi derecho, porque yo no podré redimirla.

7Había ya desde antaño esta costumbre en Israel acerca de la redención o del contrato, que para la confirmación de cualquier negocio, uno se quitaba el calzado y se lo daba a su compañero; y esto servía de testimonio en Israel.

8Entonces el pariente dijo a Booz: Tómalo tú. Y se quitó el calzado.

9Y Booz dijo a los ancianos y a todo el pueblo: Vosotros sois hoy testigos de que adquiero de mano de Noemí todas las cosas que fueron de Elimelec, y todo lo que fue de Quelión y de Mahlón.

10Y que también tomo por esposa a Rut la moabita, esposa de Mahlón, para conservar el nombre del difunto sobre su heredad, para que el nombre del muerto no se borre de entre sus hermanos ni de la puerta de su lugar. Vosotros sois hoy testigos.

11Y dijeron todos los del pueblo que estaban a la puerta con los ancianos: Testigos somos. Jehová haga a la mujer que entra en tu casa como a Raquel y a Lea, quienes edificaron la casa de Israel; y tú seas ilustre en Efrata, y tengas renombre en Belén;

12y de la descendencia que Jehová te dé de esta joven, sea tu casa como la casa de Fares, el que Tamar dio a luz a Judá.

13Booz, pues, tomó a Rut, y ella fue su esposa; y luego que se llegó a ella, Jehová le dio que concibiese, y ella dio a luz un hijo.

14Y las mujeres decían a Noemí: Loado sea Jehová, que hizo que no te faltase hoy pariente, cuyo nombre será celebrado en Israel.

15Él será restaurador de tu alma y sustentará tu vejez; pues tu nuera, que te ama y es de más valor para ti que siete hijos, lo ha dado a luz.

16Y tomando Noemí el hijo, lo puso en su regazo y fue su nodriza.

17Y las vecinas le dieron nombre, diciendo: A Noemí le ha nacido un hijo, y le llamaron Obed. Éste es padre de Isaí, padre de David.

18Y éstas son las generaciones de Fares: Fares engendró a Hezrón,

19y Hezrón engendró a Ram, y Ram engendró a Aminadab,

20y Aminadab engendró a Naasón, y Naasón engendró a Salmón,

21y Salmón engendró a Booz, y Booz engendró a Obed,

22y Obed engendró a Isaí, e Isaí engendró a David.



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